Estos hechos noticiosos han sido bien aprovechados por los representantes del gobierno a través del MIMDES, colocándose así en igualdad de condiciones. ¿Es acaso el gobierno más santo que el "Padre Martin"?
Cuando en el pasado, el "Padre Martin" se pintaba a sí mismo de modernidad para defenderse de las acusaciones que recibía, ahora guarda silencio; revelando de este modo no guardar sentido alguno con la vida que alguna vez quiso, pero no pudo llevar: El Sacerdocio.
Convertido en un personaje mediático de burla para creyentes y no creyentes, olvidamos con facilidad el pasado y juzgamos reiteradamente a la institución religiosa a la que representa. Uno visiona o lee la noticia reciente y no se hace mención a la separación de Martín Sánchez Terán de la Iglesia Católica.
Yendo más allá de la venta noticiosa, deviene tal proceder en una complicidad mediática. Cuán lejos está el conservar la objetividad, que es ser fiel más a la realidad que a lo escandaloso del hecho, pero esto no parece interesarle a los medios. Rayar en el escándalo es "vital".
Este tema llama aún más la atención cuando, a puertas de culminar el "Año Sacerdotal", convocado por el Papa Benedicto XVI desde el 19 de junio de 2009, cuyo tema es "Fidelidad de Cristo, Fidelidad del Sacerdote", los 12 mil sacerdotes de 5 continentes, reunidos ayer, en un "Encuentro Mundial Sacerdotal" en la Plaza de San Pedro, formularon las siguientes preguntas:
1) América: "...Cuando hay tanto por hacer, sentimos que lo que hacemos no es suficiente... ¿qué dirección debemos tomar?". El Papa Benedicto XVI respondió: "Descansar, reconocer las limitaciones y abrazar la humildad".
2) África: "... ¿Cómo no desorientarnos cuando el mundo juzga la fe y no la fe al mundo?". Benedicto XVI aseguró: "Es la soberbia de la razón. Tengan valor frente a los abusos de ella. Vivir la fe de la Iglesia. No someterse a la cientificidad del momento porque es temporal, vivir lo atemporal. Orientarse en la vida de los santos".
3) Europa: "... ¿Cuál es el sentido del celibato?". Tiernamente, el Papa dijo: "El celibato es una anticipación de que trascendemos... hacia la resurrección. Nos lleva al presente. El celibato es un escándalo en el mundo. El 'no casarse' es un 'no' al vínculo, supone autonomía. El celibato es lo contrario, es el sí del matrimonio con Cristo".
4) Oceanía: "En el futuro nos espera menos seminaristas... ¿Cómo proponer nuestra vida a los jóvenes?". Benedicto XVI afirmó: "Orar a Dios para que nos de las vocaciones. Vivir el sacerdocio de manera convincente, eso es lo que podemos hacer cada uno de nosotros".
De esta forma, se reencontraron sacerdotes de Italia (4,000), Francia (811), Estados Unidos (300), e Hipanoamérica (9,000), para fortalecer su fe y reafirmar sus votos. Ellos conviven a diario con los problemas de los diferentes grupos que conforman la comunidad cristiana, incluyendo a quienes no están insertados en ella.
La tarea no es simple, porque las ideas que defienden no son de este mundo. Pero, si el escándalo ayuda a resaltar lo más negativo del actuar de un sacerdote, también lo hará por las acciones positivas. Solo que para ello, la exigencia versa en el ejemplo, el cual parece ser de difícil acceso inclusive para nuestros sacerdotes.
La vida de los santos, por solo intentar serlo, ocasionaba constantes escándalos. Ricos y pobres conformaban las multitudes que se aglutinaban para solo escucharlos o tocarlos y así obtener la gracia: El poder de la conversión.
La comprensión de estos temas parece habernos sido negada si no revisamos la historia. Sin ella, andamos ciegos juzgando lo inmediato. Abramos los ojos y apoyemos a los sacerdotes que se esfuerzan en ser "ejemplo", pues han tenido el valor y el coraje de recorrer ese camino que es altamente difícil para la mayoría de nosotros.